Sin que pueda jamás




Y buscó en el ayer un refugio entre penas, 
un pasado que ahogó sus nostalgias vividas
cual antaño crucial de inminentes caídas
en colinas angostas y en quebradas ajenas.


Vislumbró al caminar añoradas almenas
y esas luces de paz por el sol revestidas,
fueron más que un fulgor de almenaras prendidas
mientras sin pregonar derribaron cadenas.


Y admitió la razón, confesó sus verdades,
se tocó el corazón sacudiéndose todo
concediendo el honor de sanar realidades.

Solamente el amor dignifica bondades
y el orgullo ahogará su mentira en el lodo,
sin que pueda jamás perpetuar sus maldades.
















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